Laura Valero es asesora nutricional y entrenadora personal en la empresa «Entrena Con Sentido» (C/ General Gutiérrez Mellado, local 2 (Alicante)). Su pasión es la transformación total de sus clientes. En nuestra conversación, descubriremos cómo Laura combina su experiencia en nutrición y acondicionamiento físico para ayudar a las personas a alcanzar sus objetivos de salud de manera integral.
¿Cómo se justifica que la correcta alimentación es el primer paso para la salud?
Un mito que intento “sacarle de la cabeza” a mis clientes, es la asociación que se crea de que al hacer ejercicio puedo comer lo que quiera sin ningún tipo de riesgo o consecuencia. Me gusta explicar esto utilizando una cebolla. Si nos imaginamos una cebolla, la primera capa sería nuestro aspecto físico que, supuestamente, al hacer más ejercicio mejor tiene que ser. Pero esto es un gran error pensarlo, porque no estamos teniendo en cuenta el resto de capas de la cebolla. Si vamos desgranando capas, encontramos aspectos como la calidad del sueño, estado psicológico, relaciones inter-personales, estado de ánimo, aspectos bioquímicos (glucosa, colesterol, tensión arterial, proteínas hepáticas y renales, vitaminas …). Justo en el centro de esa cebolla, en el corazón, en el motor que mueve el perfecto engranaje de nuestro cuerpo, encontramos la alimentación. Y es que, una mala calidad del sueño, un estado de ánimo irritable sin causa aparente, una mala condición a la hora de entrenar, enfermedades crónicas (diabetes, colesterol, hipertensión …), en la mayoría de casos, pueden estar relacionados con una incorrecta alimentación.
Sin ir más lejos, si no tengo una alimentación correcta, la flora bacteriana se puede ver afectada y, esto que, aparentemente no tiene gravedad, nos puede hacer estar más irritables, tener una peor calidad de sueño que, puede hacer que, si estamos con una alimentación para perder peso, nos quedemos estancados o, no rindamos bien en los entrenamientos porque no haya una correcta recuperación a nivel muscular.
Por todo esto, primero vamos a reaprender a comer bien, no con dietas, no con restricciones, sino con cambios de hábitos y con educación nutricional. A mis clientes, nunca le hablo de dietas, porque son inútiles y nos hacen ser esclavos toda nuestra vida de un papel, generándonos, en muchos casos, problemas de tipo psicológico (ansiedad, depresión, “soy un bicho raro”, incluso en casos más graves un trastorno de la conducta alimentaria). Cambio de hábitos y educación nutricional, consiste en hacer a la persona lo más independiente posible en base a la alimentación, porque cuanto más conocimiento tengan, más libres se van a sentir.
La alimentación y el ejercicio a menudo se asocian con el control y la disciplina ¿Cómo fomentas una relación positiva con el cuerpo y la salud?
Si hablamos de control y disciplina en el cambio de hábitos, puede ser que parezca que estamos haciendo referencia al desarrollo de un patrón rígido y esclavo para nosotros mismos.
A mí, personalmente, me gusta más utilizar el término autogestión eficaz. La clave está en hacer comprender a los clientes para qué quieren ese cambio de hábitos tanto a nivel nutricional como deportivo. Y, sobre todo, experimentar en sí mismos el beneficio resultante y, eso en cada persona, lleva su tiempo.
En la búsqueda de la salud, las personas pueden encontrarse con desafíos y obstáculos ¿Cómo abordas la idea de la perseverancia en tus programas de entrenamiento y nutrición?
La perseverancia no es un proceso lineal en cualquier cambio de hábitos tanto a nivel nutricional como deportivo. El cambio pasa por unos pasos. Por ejemplo, hoy estoy muy convencido y sigo, mañana pienso esto no me está funcionando, no voy a ir, lo dejo …
Mi labor está en enseñar al cliente cómo podría ser su propio proceso de cambio, hacerle un mapa de su proceso con los posibles obstáculos que se puedan presentar. También, hay que hacer ver al cliente que, cuando aparezca un desafío u obstáculo que le provoque una bajada de motivación, nunca va a volver a empezar desde cero.
Por eso, tanto el entrenamiento como la nutrición, tiene que ser un proceso totalmente personalizado.
La nutrición y el ejercicio pueden ser vistos como un medio para alcanzar un fin, como una apariencia física deseada. ¿Cómo fomentas la idea de que el viaje hacia la salud es un proceso valioso en sí mismo, independientemente de los resultados externos?
El primer paso siempre pasa por desmitificar toda la información que obtienen de las redes sociales y que, en muchas ocasiones, no es para nada realista. Esto es un hándicap al qué día a día tengo que hacer frente.
Siempre hay que hacer consciente al cliente de que el cambio empieza siempre desde su propio cuerpo y condiciones, no de las comparaciones con los demás.
Los objetivos de salud pueden variar ampliamente entre clientes ¿Cómo personalizas tus servicios y programas para adaptarse a las necesidades y deseos individuales de cada persona que busca tu orientación?
El éxito en estos casos, está en hacer una historia clínica exhaustiva tanto a nivel nutricional como deportivo de cada cliente, donde se recaba información referente a todos los aspectos de su vida (nutricional, deportivo, calidad de sueño, objetivos, horarios de trabajo, presencia de ansiedad, cuáles son sus gustos, medicación, suplementación deportiva, tipo de lesión …). Una vez, se obtenga toda esta información, se realiza una valoración nutricional y deportiva. Y es entonces, cuando pasamos a ponernos en acción con el proceso de cambio, introduciendo cambios pero de forma muy gradual, porque no hay que olvidarse que, lo que estamos buscando es un cambio de hábitos y no un proceso milagro.
¿Qué tipo de ejercicio es el adecuado para mantener el músculo en un buen estado?
Existe la creencia de que si hacemos ejercicios de fuerza el músculo va a sufrir un gran desarrollo y “nos vamos a hinchar”. Esto es una frase que escucho muchas veces al día. Por eso, la gente suele hacer muchos más entrenos de Cardio y quitarle importancia a los entrenamientos de fuerza. Esto lleva muchas veces, a la aparición de dolores y lesiones.
En función de los objetivos de cada persona, hay que buscar el correcto equilibrio entre los entrenamientos de resistencia y de fuerza, por eso, vuelvo a repetir la importancia de que los entrenamientos sean personalizados.
Los entrenamientos de fuerza ayudan a la prevención de lesiones para cualquier tipo de deporte y, además, previenen o mejoran la calidad de algunos problemas generados por la edad (osteoporosis, debilidad del sistema articular …), mejora de la postura corporal, protege el sistema óseo …
En tu centro hemos visto trofeos de pruebas deportivas ¿Pueden comentarnos algo acerca de esto?
Los trofeos que habéis podido ver en el centro, corresponden a trofeos de diferentes carreras de obstáculos (OCR) en las que he participado, incluyendo el primer puesto de la Comunidad Valenciana en categoría popular. Las OCR, es un deporte que se centra en carrera combinado con obstáculos tanto de suspensión como de fuerza y agilidad.
La última carrera de OCR la corrí el año pasado, correspondiente al autonómico celebrado en Lloc Nou de Sant Jeromi. Debido a una lesión, he tenido que dejar estas carreras y, ahora estoy compitiendo en halterofilia con el Club Power de San Vicente.
A medida que las personas envejecen, a menudo experimentan cambios en su cuerpo y su salud ¿Cómo abordas la importancia del ejercicio a lo largo de toda la vida, y qué recomendaciones específicas ofreces a tus clientes para mantener un estilo de vida activo y saludable a medida que envejecen en tu centro de entrenamiento?
Conforme las personas van envejeciendo el sistema óseo y muscular, junto con las articulaciones se van debilitando y, tienden a aparecer enfermedades como osteoporosis, artrosis … y el riesgo de caídas se ve incrementado. Principalmente, en las mujeres, este deterioro comienza con la pre-menopausia y menopausia, donde se sufre una bajada de estrógenos.
Por tanto, los ejercicios de fuerza son importantes para poder fortalecer el sistema muscular y ayudar, de esta forma, a la protección tanto del sistema óseo como del articular. Además, estos ejercicios de fuerza, se suelen combinar con ejercicios de movilidad articular, para ayudar a las personas a mejorar su agilidad en rutinas de la vida cotidiana (subir escaleras, dar un paseo, coger a los nietos en brazos, llevar las bolsas de la compra…)
Esto en lo referente al aspecto físico, pero no debemos olvidar que, el ejercicio también es un gran estimulador del aspecto psicológico, ya que, ayuda a las personas a sentirse mejor consigo mismas y a tener una mejor calidad de sueño.
Hay personas a las que no les gusta hacer ejercicio, pero muchas veces se motivan porque enfocan la hora de hacer deporte a relacionarse socialmente. Y este, es otro aspecto que hay que tener en cuenta.
Por tanto, el venir al centro Entrena ConSentido, no es sólo venir a hacer deporte, sino que tiene una visión mucho más amplia, ya que, tenemos en cuenta, tanto el factor físico, psicológico y social de nuestros clientes.
