Fue el contrapunto a la normalidad en la provincia de Alicante. La presidenta del PP local, y edil por tercera legislatura consecutiva, abandonó el salón de plenos una vez tomada posesión de su escaño y antes del discurso del alcalde el pasado sábado 15 de junio, llamando “cerdos” a parte del público asistente en la Casa de Cultura alfasina donde se celebró el acto, mientras salía del recinto despavorida dejando sin palabras a sus compañeros de partido, quienes comprobaron la bajeza y pobreza personal de su líder política a nivel local, una mujer auspiciada por la cúpula provincial del PP de forma incomprensible ante los ojos de los alfasinos. Según ha sabido Agencia6, esperan que desde Alicante se la invite a dimitir ante la insoportable situación generada por Maite Huerta en los últimos tiempos, rematada el sábado con su comportamiento pueril insultando “de nuevo” al pueblo de l´Alfàs del Pi.
Muchos se preguntaban en la Casa de Cultura de l´Alfàs si esta mujer necesita de este protagonismo para tener su momento de “gloria” en los medios de comunicación. Todos ustedes recordarán el escándalo de los videos que salieron en plena campaña electoral de cara al 26 de mayo pasado, que ya tuvo un precedente en el año 2011 cuando el día de las elecciones locales, donde Maite Huerta era candidata a la alcaldía por primera vez, montó un circo ante la mesa electoral donde una mujer con distinta capacidad quiso votar acompañada de una persona de su confianza, quien a su vez iba en la lista del PSOE local. Recordemos aquel hecho que tuvo repercusión nacional en casi todos los medios escritos, radiofónicos y de televisión:
Maite Huerta, ante el escándalo de los videos aparecidos en plena campaña el pasado mayo donde insultaba a los suyos, al gobierno, a la oposición e incluso a la prensa, intentó la pasada semana por todos los medios evitar su presencia física en el acto de constitución de la nueva Corporación Municipal de la que forma parte.
Desde la Secretaría General del Ayuntamiento de l´Alfàs del Pi se apeló al sentido común de la presidenta local del PP, dado que su curriculum político cuenta con ocho años como edil de la localidad. Si quería tomar posesión de su escaño, “debía estar presente el sábado 15 de junio en el Pleno”.
Al parecer Maite Huerta temía una reacción del sabio pueblo de l´Alfàs en el momento de tomar posesión, detalle que demuestra su desconocimiento de los alfasinos ante comportamientos insensatos de políticos que llegan a formar parte de una candidatura de manera incomprensible
Llegado el momento de la toma de posesión, los veintiún ediles juraron o prometieron sus cargos, y a continuación se realizó la votación a mano alzada para elegir entre todos ellos al Alcalde de l´Alfàs del Pi para la legislatura 2019-2023. El resultado fue de catorce votos a favor del cabeza de lista del PSOE, cuatro para el candidato del PP, dos para Ciudadanos y uno para Podemos. En ese momento Vicente Arques tomó la vara de mando por cuarta legislatura consecutiva.
En ese momento, cuando el alcalde recién elegido iba a dirigirse al público asistente, Maite Huerta se levantó de su silla y bajó del escenario acompañada por su secretario personal, quien la condujo hasta su vehículo. Alguien entre el público le reprochó su actitud por abandonar un acto tan importante a medias de su celebración, a lo que respondió la edil del PP con un sonado “sóis unos cerdos”. El respetable guardó silencio, que fue el mejor comportamiento posible ante la patada que esta mujer acababa de dar al pueblo de l´Alfàs del Pi.
Agencia6 captó el momento de la salida del recinto, y vean la estampa de la edil saliente del PP, Goyi Álvarez, quien acudió a intentar enmendar la situación, quedándose la pobre perpleja ante lo que estaba haciendo la cabeza del Partido Popular en la localidad. Son seis instantáneas que delatan la muerte de los populares en este municipio de la Marina Baixa debido, entre otras cosas, a la pésima gestión de su mal llamada “líder”.
Ahora falta saber cuál será la reacción de la cúpula del PP. Esta mujer, como el resto de sus compañeros, tendrá voz y voto para elegir a los dos diputados que le corresponden al Partido Popular por la demarcación de la Marina Baixa en la Diputación Provincial. Los ciudadanos no podemos permitir que personajes de esta catadura moral puedan tener decisión en gobiernos supramunicipales. Maite Huerta debe dimitir ante sus propios hechos, incompatibles con un cargo púbico en una democracia, siendo a la vez irreconciliables con la gente a la que se trata de esta forma tan indecorosa.
Según cuentan a Agencia6 miembros del PP alfasino, Maite Huerta ya piensa en hacer de tránsfuga y ocupar un escaño en el grupo de No Adscritos. “Hará cualquier cosa con tal de seguir haciendo el ridículo ante todos”, comentan sus compañeros de viaje hasta el día de hoy
El acto finalizó con la foto de familia de veinte de los veintiún ediles elegidos por el pueblo de l´Alfàs del Pi el pasado 26 de mayo. Faltaba ella, faltaba Maite Huerta, porque no quiso escuchar el discurso del alcalde Vicente Arques quien, dicho sea de paso, más que un discurso de arranque de legislatura ofreció un mitin político. No sabemos si alguien le colocó los papeles equivocados en el atril, o fue un “capricho” del socialista. Este hombre da como ejecutados proyectos que siguen siendo una utopía, y cree lo que dice pese a ser mentira. Vive en otro mundo, sigue sin pisar las calles del pueblo.
Vicente Arques lleva doce años gobernando sin oposición y eso es lo peor que puede sucederle al municipio. Todo gobierno necesita de una oposición fuerte y responsable, lo demás es un fracaso de la propia sociedad
Alguien debe iniciar el proceso de organizar en l´Alfàs del Pi una oposición a un partido socialista que ha gobernado treinta y seis años de los cuarenta que disfrutamos de ayuntamientos democráticos. Ese cambio debería iniciarse esta misma semana, coincidiendo con el arranque de la legislatura. En ocasiones, la mejor oposición puede realizarse desde la calle, y es algo que los alfasinos piden a gritos, y para ello alguien deberá tomar la responsabilidad de fiscalizar a todos, a un gobierno y una oposición que parecen no enterarse mucho de las necesidades de la localidad.
Una cosa es votar al mejor, y otra votar al menos malo, que es lo evidencian los resultados del 26 de mayo en la localidad. Los catorce concejales del ejecutivo alfasino no garantizan tranquilidad y sosiego hasta el 2023. Todos ellos saben que han tocado techo y deben trabajar de forma inmaculada los próximos cuatro años. La población les ha brindado una nueva oportunidad, pero no un cheque en blanco. La oposición fue enviada directamente por el pueblo al reciclaje y a la oficina del paro, ésa que ahora se llama “Labora”, pero parece que tampoco tienen intención de dar paso a savia nueva. Pase lo que pase, aquí estaremos para contárselo a todos Ustedes.