No merece la pena repetir aquí lo que estamos hartos de escuchar en las últimas semanas acerca del fraude que supone que tengamos a un presidente del gobierno que mienta, y quien gracias a sus falacias y mentiras, lograra el pasado 10 de noviembre una cantidad de votos que, de haber dicho la verdad a sus potenciales electores de lo que está consumando, no hubiese conseguido ni uno en el mejor de sus sueños.
La culpa de todo lo que estamos viviendo es exclusivamente del PSOE y de Pedro Sánchez, a quienes los suyos no sólo le han permitido escalar destruyendo la formación nacida hace casi siglo y medio, sino que ahora callan en público cuando en privado hablan pestes de su líder. La cobardía de estos presuntos «valientes» de la vida pública española, desde ayuntamientos hasta el Parlamento, es una causa para que sea analizada por los psiquiatras y médicos especialistas de las enfermedades mentales.
No admitamos el mensaje fascista que nos quieren inyectar desde la ultraizquierda estos días y harán constantemente a partir de hoy, echando la culpa a todos quienes no comulgamos con esta operación suicida para todos, porque aquí hasta ellos van a caer como chinches. La culpa es sólo del PSOE, porque nacionalistas, secesionistas y bolivarianos leninistas no han ocultado jamás sus intenciones
Quien ha ido a buscarlos a todos ellos ha sido Pedro Sánchez, un personaje que en ciertos momentos estos días, me ha recordado a aquel alemán con bigotillo que llegó al poder con los votos y luego montó en el mundo la guerra más terrible que ha soportado el planeta Tierra en toda su historia.
No sé lo que durará este gobierno, creo sinceramente que muy poco, pero los españoles debemos empezar a poner orden ante este dislate, y tenemos que empezar a enviar a los socialistas que conozcamos en nuestro entorno el rechazo a lo que están haciendo todos ellos porque todos han callado, y su complicidad y silencio es parte de esta jugada en forma de herencia demoledora para nuestros hijos y nietos.
Una pregunta que nos hacemos muchos.
¿No hay via legal alguna para llevar a este mentiroso ante un tribunal, incluído el Internacional de Derechos Humanos en La Haya, ante el oprobio y daño que está causando, de manera muy especial a las familias de víctimas mortales y heridos por el terrorismo con el que ahora ha pactado, logra su apoyo, y además aplauden en el mismísimo Congreso de los Diputados como vimos el otro día?
Lo que ha hecho el PSOE con los electores pidiendo el voto con un mensaje que ha servido para limpiarse el tafanario Pedro Sánchez, lo que hizo a las pocas horas de los comicios pactando con el «que traería las cartillas de racionamiento» ni tampoco «con el que no me dejaría dormir por las noches», merece que escupamos en la cara a más de uno que, encima de todo ello, venga hablando de progresismo y futuro escudándose en un partido sanchista que es la vergüenza nacional.
Termino. Este peligroso personaje ha provocado que incluso en Europa nos digan a través de sentencias que qué es lo que pedimos cuando aquí nuestro propio gobierno negocia y pacta con los malos. El mundo al revés. Así nos va y peor que nos irá si nadie lo remedia.
Feliz martes!
