OPINIÓN
Vamos por partes, llegar, llegará mas tarde que pronto, pero llegará aunque sea “poquet a poquet”, como llegó en su día el furtivo géiser (que no pudimos mantener), la Estación de Autobuses (que no podemos utilizar por su estado), la Casa de Cultura (que se ha quedado en la Ca de la Cul), el Centro Comercial (cuya Primera Piedra, digo Olivera, se ha convertido en montículos de tierra y áridos) y para que seguir con esta procesión de tiempo, esfuerzo y dinero perdidos por la ineficacia, ineptitud, torpeza e inutilidad de los sucesivos gobiernos.
Imaginemos por un momento que en lugar de tener gobiernos democráticos tuviéramos una empresa privada encargada de nuestro día a día y de nuestro supuesto futuro pluscuamperfecto… o la empresa hubiera desaparecido víctima de su pedantería y necedad… o los ciudadanos hubiéramos salido huyendo estilo afgano. Gracias a Dios no ha sido así porque por el momento nos aguanta como barco en dique seco el “Benidorm te espera” y la esperanza es lo último que se pierde. ¿Que esperamos junto a Benidorm?
Esperamos nuevas elecciones, esperamos gobiernos cuya prioridad sean los vecinos, esperamos transparencia en sus actuaciones y mas exactamente en estos momentos esperamos el Tecno-hito o como demonios se llame, Porque al parecer nos va a costar 12.000.000 € millón arriba, millón abajo, unos mil euros por vecino
Al principio me preguntaba… ¡cuando llegue el Tecno-hito que sera de mí!, porque el calificativo no me parece el mas adecuado a la vista según la Real Academia de la Lengua Española. Define la palabra hito como: “Mojón o poste de piedra, por lo común labrada, que sirve para indicar la dirección o la distancia en los caminos o para delimitar terrenos”, palabra que proviene del latín vulgar fictus.
Por lo que han manifestado en repetidas ocasiones el amo Pérez y su capataz González, el Tecno-hito es absolutamente metálico y no tiene piedra alguna que lucir en su estructura. La palabra tecno proviene del griego techno, significa “técnica”. Por último la palabra Tecno-hito no existe en castellano según la RAE, a fin de cuentas unir latín y griego en un todo, es como amalgamar agua con aceite. Hay que reconocer que nuestros vecinos franceses fueron mas cuidadosos en su lenguaje cuando dieron nombre a la Torre Eiffel, la llamaron lo que es, una torre.
El caso es que no trato de comparar dimensionalmente una construcción metálica de 324 m. de altura con otra construcción metálica de 22 m. porque caería en la sintágmica adjetival y diferencial entre torre y poste, y aquí andamos sobrados de torres y de postes. Lo cierto es que puntal más o puntal menos no importa si ademas como es el caso, lleva luz-led incorporada y hasta una escalera de caracol, porque ese debe ser el motivo del prefijo tecno, lo del sufijo hito no logro entenderlo, mi nivel esta como el del amo, su capataz y resto de peones, falto de cultura urbanística.
A todo esto me pregunto con cierta preocupación: El tecno-hito tendrá mantenimiento a no ser que se fabrique en acero inoxidable… ¿Alguien ha previsto ese gasto anual? ¿pasará con él como ocurrió con el géiser? ¿como con la madera del paseo de la Armada Española? ¿como con el pavimentado de tantas avenidas y calles?. A fin de cuentas poco importa el retraso porque llegar, llegará.
La culpa la tiene la pandemia, y si algo sale mal la culpa será de los técnicos, que para eso están. Con similar impaciencia, zozobra e intranquilidad con la que Benidorm me espera, espero con desasosiego, neviosismo y ansiedad la llegada del Tecno-hito de las narices.
José Antonio Corachán Marzal
Un benidormense de toda la vida
