El Palau de la Generalitat ha acogido este domingo la capilla ardiente del poeta Francisco Brines, fallecido el pasado jueves a la edad de 89 años.
El president de la Generalitat, Ximo Puig, el ministro de Cultura y Deporte, José Manuel Rodríguez Uribes, miembros del Consell, autoridades de la Comunitat Valenciana y la familia de Francisco Brines han asistido al homenaje previo a la apertura a la ciudadanía de la capilla ardiente.
«Hoy el pueblo valenciano lo que hace es reconocer y darle un último abrazo a quien ha sido, sin duda, una de sus voces más lúcidas», ha señalado el president de la Generalitat.
El president ha destacado que Brines, Premio Cervantes 2020 y Alta Distinción de la Generalitat, es una «referencia española, europea y universal» de las letras, que lega una «poesía nacida de los sentimientos y las razones que nos unen a la humanidad».
«Desde el sentimiento, el afecto y la tristeza queremos decir que la vida es un paréntesis entre dos nadas», ha dicho Ximo Puig en alusión a unas recientes palabras pronunciadas por el poeta, pero él «no nos ha dejado la nada, sino un espacio común de amor, de ternura, de sentimiento y de pasión por la vida», ha continuado.