Hoy, Día de la Fiesta Nacional, Vox ha convocado manifestaciones contra la irresponsable gestión del ilegítimo gobierno socialcomunista de España. Acudamos muchos o pocos españoles a ellas, el partido de Santiago Abascal ya ha triunfado ante el incomprensible acomplejamiento del Partido Popular
España está en el sanatorio, y entre todos debemos y tenemos que lograr que España no termine y finalice en el tanatorio. Parece una utopía, pero como bien dijo alguien de la izquierda española en su día, «las utopías están para cumplirse», y no podemos permitirnos que quienes ilegítimamente llegaron al actual gobierno, consigan sus propósitos.
Miren amigos, la situación es límite porque si permitimos que se deteriore un peldaño más, será irreversible. Que nadie espere nada bueno de quienes nos han metido en este lodazal, que nadie piense que desde el actual gobierno nacional van a surgir soluciones para algo, porque si en nueve meses han sido capaces de destrozarlo todo y dinamitar las estructuras más fuertes del Estado, sólo resta el «golpe» final para encontrarnos huérfanos de aquello que tanta riqueza ha dado a la sociedad española en las últimas décadas, con sus sombras y sus luces, porque de todo hemos tenido en este bendito país al que algunos quieren destrozar.
En la última década hemos visto surgir partidos políticos que venían a cambiarlo todo para bien, y estamos viendo que no, que hemos llegado al año 2020 y sólo hay una formación que está dispuesta a luchar por la unidad de España, el bienestar de sus gentes, la defensa del orden, la Ley, la Constitución y la Jefatura del Estado encarnada en el Rey de España, Don Felipe VI. El resto andan jugando a sus cábalas electorales o sus ensoñaciones caribeñas, y así hemos llegado al punto donde el pueblo, todos nosotros, junto a la implacable acción de la Justicia, puede parar de cuajo este sinsentido que ya alarma al mundo como estamos viendo reproducido en las plumas de los mejores comentaristas internacionales en medios de prestigio.
Tanto PSOE como Podemos merecen un castigo por todo lo que están haciendo. No hace falta citar la catarata de imbecilidades que hemos venido observando, antes y durante la pandemia, algunas con tinte criminal. De Ciudadanos sólo nos resta acudir a la funeraria para encargar su corona, a la vista de la deriva de sus pocos cargos públicos con capacidad de decisión que quedan en la piel de toro, están finiquitados de forma irremediable.
Nos quedan el segundo y tercer partido del Parlamento español, PP y Vox, a quien correspondería un gesto en beneficio de España uniéndose, pero vemos que al menos el PP anda atacando a su compañero de viaje en lugar de estar guillotinando al actual gobierno «asesino» de la España que todos hemos conocido, y que al paso que vamos, «no la va a conocer ni la madre que la parió», pero esta vez desgraciadamente, no por cosas buenas.
Los españoles de bien, si el PP no espabila y empieza a demostrar lo que ya deberían estar haciendo, se irán a Vox de forma irremediable. Hoy por hoy, la única vía para acabar con el actual gobierno socialcomunista es una apuesta fuerte por un partido de derecha, y el PP de momento no se está ganando ni la simpatía ni la confianza de los españoles. Por afecto o por descartes, será Vox quien se lleve «el gato al agua». Tiempo al tiempo, que no será mucho a la vista del cenagal en el que nos encontramos.
Hoy los opositores al actual gobierno infame y liderado por una persona con ademanes de no andar bien de la cabeza, tienen una ocasión única: el Día de la Fiesta Nacional de España. Y sólo Vox ha sabido reaccionar convocando manifestaciones en todos los pueblos de nuestro país para rechazar la gestión de un gobierno que jamás debió llegar a La Moncloa, no en vano, lo hicieron mintiendo al pueblo español.
Si por el gobierno actual fuese, hoy Vox no podría manifestarse porque lo habrían impedido ipso facto. Sin embargo, la Carta Magna aprobada por mayoría absolutérrima del pueblo español en 1978, lo permite
Hoy Vox puede hacerlo gracias a la Constitución al igual que Pablo Iglesias se refugia en ella como aforado para evitar estar imputado con sus presuntos casos de delincuencia cometidos en sus líos y enzarces que, al menos a mí, no me importan lo más mínimo. Sólo me interesa saber que quien ataca a mi Constitución, la utiliza cuando le interesa, y por tanto, yo sólo quiero que también esa Constitución sirva para que le condenen si es que los jueces y la Justicia entienden que se violó la Ley y el Código Penal en algún momento. Sin más.
Hoy quiero felicitar a Vox por su valentía convocando a España a manifestarse en una «Caravana por la Libertad», porque nuestra Constitución lo permite como regla del juego en una democracia. Y como tal, hay que utilizarla las veces que haga falta y sea menester.
Nuestro país, como dije al principio, está en el sanatorio, y entre todos debemos evitar lo peor, arropando a nuestro Jefe del Estado y a la Justicia, que junto al pueblo y los partidos leales a la Constitución Española, son pilares que nadie debe quebrantar. Nos va todo en ello.
Feliz 12 de Octubre. ¡Viva España! ¡¡¡Viva el Rey!!!