El Ayuntamiento de San Vicente ha aprobado la adquisición de 47.135 m2 de suelo junto al Cementerio Municipal para garantizar la capacidad del camposanto durante los próximos 50 años. Los técnicos municipales consideran que la operación de compra ha sido “muy ventajosa” para el Ayuntamiento, que va a pagar 298.000 euros por el suelo. El ritmo de ocupación de sepulturas en los últimos 10 años es de 226 nichos y 24 columbarios al año.
La última ampliación realizada en el Cementerio Municipal, de 22.639,26 m2, en 2004, registró numerosas incidencias (intervención del Jurado Provincial de Expropiación, dos contenciosos ante el Tribunal Superior de Justicia y sentencia definitiva del Tribunal Supremo”, y terminó saliendo muy cara para el Ayuntamiento: cerca de tres millones de euros. Ahora, sin embargo, se compra más de doble de suelo de entonces: 47.135 m2, y se paga más de veinte veces menos: 298.000 euros.
Al Cementerio le queda en la actualidad una vida útil de ocho años. Así lo certifica un informe del Arquitecto Técnico Municipal y de la Jefe del Servicio de Arquitectura, en el que, tras analizar la previsión de ocupación de sepulturas y el espacio disponible, constata que “con el ritmo de ocupación actual la ampliación del cementerio dispone de capacidad para un período aproximado de ocho años”.
El alcalde en funciones de San Vicente, Jesús Villar, ha explicado que a lo largo del mandato que ahora concluye “el Ayuntamiento ha realizado diversas inversiones en construcción de nichos y columbarios y ahora, con la adquisición de terrenos, dejamos el Cementerio de nuestra ciudad con una capacidad suficiente para más de medio siglo”. Las gestiones directas del alcalde en este asunto han contribuido a que el Ayuntamiento haya obtenido unas muy buenas condiciones en la compra de los terrenos.
El ritmo de ocupación de sepulturas en los últimos 10 años es de 226 nichos y 24 columbarios al año
Por su parte, Mariló Jordá, concejala en funciones de Urbanismo e Infraestructuras, ha destacado la buena gestión realizada por su departamento. “La diferencia de precio entre la última ampliación del Cementerio y ésta es abismal y ahora incluso tenemos las cuentas saneadas y no necesitamos pedir a los bancos para pagarla, por lo que creo que es de justicia reconocer que el proceso se ha desarrollado de forma eficiente y eficaz”.
De acuerdo al reglamento de prácticas de policía sanitaria mortuoria en el ámbito de la Comunitat Valenciana, “la capacidad que debe tener un cementerio debe determinarse en función del número de defunciones ocurridas en el término municipal durante los últimos años, así como de su evolución”. Cada cementerio, igualmente, debe disponer de un número de sepulturas que posibilite hacerse cargo de los entierros que se prevean para los 20 años siguientes a su construcción, y de terreno suficiente para poder incrementar este número de sepulturas según las necesidades previstas para los siguientes 25 años”.
En los trabajos preparatorios del nuevo Plan General, que han sido objeto de consulta pública y participación ciudadana, figura el terreno colindante, perteneciente a la misma finca que fue objeto de la expropiación indicada, como ubicación idónea prevista para la futura ampliación del Cementerio, por lo que se aconsejó la adquisición directa que ahora se formaliza.
El Presupuesto Municipal vigente para 2019 ha previsto este gasto e incluye una aplicación presupuestaria por importe de 300.000 euros, destinado a la adquisición de terrenos.