- Hay doce detenidos en Benidorm (5), Granada (6) y Valladolid (1), como presuntos autores de más de 100 estafas en las que habrían obtenido más de 3.000.000 de euros de beneficio ilícito
- Los investigados habían creado cinco empresas mercantiles que utilizaban para blanquear el dinero proveniente de las estafas
- Se han realizado dos registros en los que se han intervenido más de 20.000 euros en efectivo y una importante cantidad de joyas y relojes de alta gama, además de ordenadores y material informático
Agentes de la Policía Nacional, en una operación conjunta con la Guardia Civil, han desarticulado una organización criminal internacional especializada en la comisión de estafas por el método de SIM swapping. Hay doce detenidos en Benidorm (5), Granada (6) y Valladolid (1), como presuntos autores de más de 100 estafas en las que habrían obtenido más de 3.000.000 de euros de beneficio ilícito. A los arrestados se les acusa de los delitos de estafa continuada y agravada, usurpación de identidad, blanqueo de capitales, falsedad documental, revelación de secretos y pertenencia a organización criminal. Los investigados habían creado cinco empresas mercantiles que utilizaban para blanquear el dinero proveniente de las estafas. Se han realizado dos registros en los que se han intervenido más de 20.000 euros en efectivo y una importante cantidad de joyas y relojes de alta gama, además de ordenadores y material informático.
La investigación, que se inició hace aproximadamente un año, ha contado con la colaboración de analistas de Europol y de la Policía Nacional de Italia.
Modus Operandi: el SIM swapping o clonado de tarjeta SIM
El método utilizado para la estafa consta de varias fases; en una primera fase, los investigados se apoderaban de las claves de acceso a los portales de banca online de las diferentes entidades mediante técnicas de “phishing”, “malware” o “pharming”. Conseguidas las claves, los autores solicitaban un duplicado de las tarjetas SIM de las diferentes víctimas, aportando a las empresas de telefonía móvil documentación falsa -en algunos casos, incluso de personajes públicos- con intención de recibir los códigos de confirmación de las transferencias fraudulentas que posteriormente realizaban.
Obtenidos esos códigos, realizaban las transferencias fraudulentas desde las cuentas de las víctimas a cuentas de terceras personas, que les servían para canalizar el dinero. En otras ocasiones, también solicitaban préstamos preconcedidos o microcréditos a las entidades bancarias, con el fin de obtener mayor beneficio económico.
Todo ello se realizaba en un corto periodo de tiempo, entre una y dos horas; tiempo máximo en el que la víctima se percataba de que su teléfono había dejado de funcionar -ya que su tarjeta SIM estaba inactiva- debido a que ya se estaba operando con la nueva tarjeta duplicada.
De esta manera, a cada perjudicado le sustraían de sus cuentas bancarias cantidades que iban desde los 6.000 hasta los 137.000 euros, en uno de los casos.
La organización criminal contaba, entre sus miembros, con nacionales de Italia, Rumanía, Colombia y España. Si bien los cabecillas de la misma eran de origen napolitano y se habían asentado, desde principios del año pasado, en la localidad de Benidorm manteniendo un contacto muy estrecho con un grupo mafioso de su localidad natal.
Blanqueo de las ganancias ilícitas obtenidas
Con el fin de blanquear las ganancias ilícitas obtenidas con las estafas, los miembros de la organización habían creado un total de cinco mercantiles con varias cuentas bancarias cada una. Todas ellas presentaban el mismo objeto social y domicilio, pero sin ningún tipo de actividad mercantil.
Dichas cuentas se nutrían de los ingresos en efectivo realizados por los miembros del grupo y, presuntamente, provenientes de las estafas cometidas. Posteriormente, con ese dinero pagaban las nóminas a los empleados de las mencionadas empresas -ocho en total- que habrían llegado a España desde Italia, donde eran dados de alta como trabajadores en la Seguridad Social. De esta forma, abrían varias cuentas bancarias y luego regresaban de nuevo a Italia, lugar donde presuntamente terminaba el recorrido del dinero estafado. Eran los propios cabecillas de la organización los que se encargaban de ingresar el dinero en efectivo para luego operar directamente con las cuentas de los empleados retirando el dinero de forma presencial, o bien transfiriéndolo directamente a cuentas bancarias italianas.
Una vez identificados todos los miembros del grupo, y tras ser detectados en la ciudad de Barcelona, se estableció un dispositivo policial que concluyó en la localidad de Benidorm con la detención de los líderes de la organización criminal, interceptados en la salida del peaje. Tras el arresto de los cabecillas, se produjeron el resto de las detenciones en las localidades de Granada y Valladolid.
Intervenidos 20.000 euros y más de 100 tarjetas bancarias
Posteriormente, los agentes realizaron dos registros en Benidorm, en los que intervinieron más de 20.000 euros en efectivo, 2 vehículos de alta gama y una importante cantidad de joyas y relojes de gran valor. Además, localizaron varios ordenadores y numeroso material informático, entre el que destaca más de 100 tarjetas bancarias, 16 terminales móviles, numerosas tarjetas SIM duplicadas y material para falsificar documentación personal. Asimismo, los investigadores han bloqueado las cuentas bancarias personales de los investigados y las de las mercantiles implicadas.
Los detenidos, cuyas edades están comprendidas entre los 22 y los 53 años, han pasado a disposición judicial, ingresando cinco de ellos en prisión provisional. Si bien la investigación continúa abierta y los agentes no descartan la aparición de más perjudicados.