Juego disponible en formato físico y digital para PC, PlayStation 4, PlayStation 5, Xbox Series X/S y Xbox One. Próximamente en Nintendo Switch.
Juego analizado en Xbox Series X/S.
Leonardo Interactive junto a Invader Studios y FunBox Media nos traen la precuela de Daymare 1998, avanzando un paso más allá gracias a una mayor inversión para el desarrollo del juego pero, ¿habrá sido suficiente o se quedará en un juego mediocre?.
Daymare: 1994 Sandcastle pone al jugador en la piel de la agente especial Dalila Reyes, una ex espía del gobierno, ahora al servicio de la H.A.D.E.S. (División Avanzada Hexacore para Extracción y Búsqueda). La misión de Reyes parece simple: ingresar a la instalación de investigación experimental más avanzada de los Estados Unidos, pero lo que no sabe, son los horrores que vivirá allí dentro.
En Daymare: 1994 Sandcastle nos toparemos con enemigos letales y con muchas ganas de acabar con la vida de nuestra protagonista. La mayoría de enemigos que encontraremos (los Decoy) son trabajadores de la zona que se habrán convertido en una especie de «momias sin bendajes» y que utilizarán a su favor la electricidad, pudiendo teletransportarse de un lado a otro. Pero eso no será lo peor porque una vez creamos haber acabado con ellos, la energía de su cuerpo se puede trasladar a otro cadaver de la zona y volver a revivir. Así que ya sabéis, a soltar plomo a diestro y siniestro.
Esta vez no tendremos escasez de armas y munición, ya que el juego se decanta más a la acción, pero prepárate para equiparte con una de las armas más poderosas: el Frost Grip. Con la nueva arma podremos lanzar nitrógeno líquido pero convertido en gas y en balas. Los enemigos se quedarán congelados durante unos instantes, los justos para llenarlos de plomo con nuestra metralleta o escopeta. Pero no todos serán tan fáciles de eliminar ya que hay algunos que son más resistentes y tendremos que ser más insistentes con el Frost Grip. Por suerte encontraremos cartuchos de combustible donde se recargará gran parte o podemos esperar que se vaya recargando lentamente, opción que recomiendo siempre que no estemos peleando y poder así ahorrar nitrógeno. Lástima que no haya una gran variedad de enemigos, porque durante todo el juego serán prácticamente los mismos, a excepción de unos pocos.
Pero no todo será acabar con los enemigos, ya que como en cualquier survival horror de la época de los 90 tendremos también que resolver puzzles. Pero no os preocupéis, porque la solución a ellos suelen estar en la zona o cerca de ella, como activar ascensores con una llave o tarjeta especial o resolver una secuencia numérica.
Gracias al escaner instalado en el brazo de Reyes, podemos analizar partes del entorno, revelar nuevos acertijos, recoger documentos secretos y detectar elementos ocultos. También disponemos de una linterna, que más bien alumbra poco, pero consigue una mayor inmersión en el juego al no saber lo que nos vamos a encontrar en las cortas distancias.
También encontraremos, a modo de coleccionable, estatuillas con forma de extraterrestres.
El apartado gráfico tiene una notable evolución del juego anterior, ya no solo en el modelado de los personajes u objetos del juego, sino en la ambientación, ya que la iluminación se ha trabajado más y hace que no estemos tranquilos en cada momento. Si jugaste a la demo, se conserva todo lo avanzado y recogido si cargamos la partida sin tener que volver a empezar.
El apartado sonoro está bien resuelto, con un buen doblaje al inglés y que cuenta con la cautivadora voz de Cristina Scabbia, vocalista de la conocida banda Lacuna Coil, la canción está compuesta por el autor italiano Alessandro Galdieri. Esta apasionante canción, ya se encuentra disponible en Spotify (link).
La edición en formato físico la tenemos gracias al estupendo equipo de Meridiem Games.
CONCLUSIÓN
Es innegable que Invader Studios ha querido ir un paso más allá con este nuevo capítulo de DAYMARE, y lo han conseguido. No está exento de clichés que hemos visto una y mil veces, y que su corta duración y la poca variedad en los enemigos juegan en su contra, pero para los disfrutamos con los juegos de horror de antaño se darán cuenta que DAYMARE: 1994 SANDCASTLE es un juego muy divertido y que gustará a todos los amantes del survival horror.
Hemos realizado el análisis gracias a un código que nos ha proporcionado Jesús Fabre.
