Como decían nuestros abuelos, tras San Juan lo que no podemos esperar son nevadas y granizadas; lo normal es que sudemos de lo lindo debido a los primeros días de intenso calor como sucede cada año. La entrada de aire muy cálido procedente del continente africano, junto con las condiciones de inestabilidad atmosférica y la fuerte insolación propia del verano, provocarán un aumento de las temperaturas a partir del próximo miércoles por encima de los 40 grados.
Según la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet), el termómetro rebasará los 35 grados en amplias zonas del interior peninsular, siendo bastante probable que alcancen e incluso superen los 40 grados en áreas del centro, interior de la mitad sur y cuadrante nordeste.
Las playas alicantinas serán las más deseadas por todos debido a la entrada de brisas de levante que no provocarán en nuestra tierra el sofoco que sí se padecerá en casi todo el país
Los valles del Ebro, Tajo, Guadiana y Guadalquivir serán las zonas más afectadas por este episodio de calor, pudiéndose alcanzar o incluso superar los 42 grados en algunos puntos, sobre todo en el valle del Ebro durante el jueves, viernes y sábado.
Además, las temperaturas mínimas serán también significativamente altas, manteniéndose por encima de los 20 grados en amplias zonas, e incluso podrían no bajar de los 25 grados en el interior de la mitad sur y centro peninsular, valle del Ebro y área mediterránea.
ido a la intensidad y duración del episodio, esta situación será calificada como ola de calor emitiéndose el correspondiente aviso especial en los próximos días. No se descarta batir récord en muchos puntos de la geografía española en un mes de junio.