59 deportistas, algunos junto a sus guías, competirán este fin de semana en las pistas de atletismo municipales de la localidad valenciana
Los mejores atletas ciegos o con discapacidad visual grave buscarán este fin de semana en Gandía las marcas mínimas para disputar los próximos Juegos Paralímpicos de Tokio.
En total serán 59 deportistas y 16 guías los que salten al tartán de las pistas de atletismo municipales de Gandía (Av. dels Esports, 9) dentro del Control Absoluto de Invierno, organizado por la Federación Española de Deportes para Ciegos (FEDC), que se ha convertido en una de las grandes citas del calendario nacional ante la falta de competiciones en los últimos doce meses debido a la pandemia.
Entre los participantes destaca la presencia del valenciano y campeón paralímpico en lanzamiento de peso en Río 2016, Kim López, así como de destacados medallistas en mundiales o europeos como el lanzador valenciano Héctor Cabrera; el saltador alicantino Iván Cano o grandes campeonas de la talla de Sara Martínez, Lia Beel o la gallega Adiaratou Iglesias, quien con un 10% de visión consiguió dos medallas de bronce a finales de 2020 en el último campeonato de España absoluto sub’23 ante atletas sin discapacidad.
Las medidas de seguridad frente al Covid 19 contemplan el uso de mascarillas por parte de atletas, entrenadores, personal de organización o voluntarios, así como la realización de un test serológico antes de la competición y el uso frecuente de gel hidroalcohólico. Además, se establece la correspondiente distancia de seguridad entre participantes en un evento que no contará con público en las gradas.
Atletismo para ciegos en más de 70 países
El Atletismo es uno de los deportes más difundidos entre las personas con discapacidad visual. Se practica en competiciones internacionales en más de 70 países.
Algunas de estas modificaciones incluyen ajustes en las instalaciones o en el modo de utilizarlas, y en su mayoría regulan la forma en la que se le brinda asistencia a estas categorías (mediante guías atleta en las pruebas de carreras y mediante guías llamadores en las pruebas de saltos y lanzamientos).
La otra gran modificación del reglamento tiene lugar en las pruebas de saltos horizontales, en los que la tabla de batida desaparece, sustituyéndose esta por una zona marcada con cal, que permite ver la última pisada del atleta antes del salto.