Se ha detenido al propietario por su presunta implicación en un delito de maltrato animal
Agentes del Servicio de Protección a la Naturaleza de la Guardia Civil de Madrid en colaboración con la Dirección General de Derechos de los Animales «de la Vicepresidencia segunda del Gobierno y Ministerio de Derechos Sociales y para la Agenda 2030» y con personal de la Concejalía de Bienestar animal del Ayuntamiento de Parla, en el marco de una campaña para prevenir el furtivismo de caza con galgo y el maltrato animal, han procedido a intervenir un total de 100 perros de una perrera clandestina situado en Parla. El operativo tuvo su origen en las informaciones que se reciben en el Servicio de Protección de la Naturaleza, que el pasado 18 de noviembre ya realizó una inspección en coordinación con técnicos municipales del Ayuntamiento de Parla, donde se detectaron algunas irregularidades.
Tras comprobar las autorizaciones perceptivas que debía tener el lugar, se comprobó que el centro carecía de las mismas, por lo que en el día de ayer se realizó conjuntamente con técnicos veterinarios de la Dirección General de Derechos de los Animales del Ministerio de Asuntos Sociales y Agenda 2030,y agentes de la policía local de Parla una inspección más exhaustiva en el centro.
Los primeros informes veterinarios, arrojaron que algunos de los perros allí alojados padecían enfermedades tales como dermatitis húmeda, enfermedades periodontales graves, otitis y presencia de parásitos internos y externos, ocasionando a los animales a un dolor, sufrimiento y estrés graves e inútiles.
Además estos informes certificaban que cinco cachorros habían fallecido a causa de las enfermedades referidas y de la ausencia de cuidados veterinarios, por lo que se ha detenido al propietario del centro por un presunto delito de maltrato animal en comisión por omisión.
Entre los animales intervenidos se encuentran perros de raza galgo y podenco.
El detenido ha pasado a disposición del Juzgado de Instrucción correspondiente.
Consejos prácticos para adquirir una mascota
- Debemos ser conscientes de que el animal necesita nuestra atención y cuidados.
- Hay que tener en cuenta que los cachorros, tanto de perro como de gato, deberán tener una edad mínima de tres meses en el momento de la venta con el objeto de evitar problemas de salud o de comportamiento derivados de un traslado, alimentación, inmunización o socialización inadecuados. Reglamentariamente se podrá restringir la edad en la venta de las crías de otras especies. En casos de animales criados fuera del territorio nacional su venta no podrá realizarse antes de que los cachorros hayan cumplido los tres meses y quince días, siendo obligatorio que sean entregados con la vacuna de la rabia.
- Debemos adquirir nuestra mascota en un centro autorizado para la venta de animales.
- Cuando adquiramos nuestra mascota, debemos informarnos sobre el origen del animal, solicitando el pasaporte sanitario que le corresponde para comprobar que tiene microchip y que coincide con el que figura en el documento.
- Conocer las vacunas que precisa nuestra mascota, las que tiene y donde le han sido puestas, y a la vez verificar el estado sanitario del animal por el informa correspondiente que nos tiene que facilitar el vendedor.
- Es necesario conocer el estado de salud de la mascota, evitando que una posible enfermedad contagiosa pueda perjudicar la salud de otro animal que tengamos en casa.
- Debemos solicitar información sobre el tiempo de cuarentena que nuestra mascota ha estado en el comercio, este periodo asegurará que el animal no esté enfermo a los pocos días de la adquisición.
- Si nuestra mascota ha sido adquirida por Internet, debemos hacerlo en portales seguros que ofrezcan todas las garantías necesarias tanto en lo relativo a documentación como a la situación sanitaria del animal.
- Cualquier anomalía que detectemos, debe ser denunciada.