La nueva Ley de Protección y Bienestar de los Animales de Compañía, que ultima la Conselleria de Agricultura y Transición Ecológica, contará con una línea presupuestaria de apoyo a los municipios para cumplir con los objetivos de sacrificio cero, erradicación del abandono y fomento de la protección animal.
La consellera de Agricultura, Mireia Mollà, ha indicado que la disposición adicional cuarta del anteproyecto señala la incidencia presupuestaria de la ley en los presupuestos de la Generalitat, tras reunirse en Tavernes de la Valldigna con los presidentes de la Mancomunitat de la Ribera Alta y la Safor, Txema Pelaez y Voro Femenia, respectivamente; el presidente del Consorcio de la Ribera, Óscar Navarro, y el alcalde de Tavernes, Sergi González.
El encuentro, que ha contado también con el secretario autonómico de Agricultura, Roger Llanes, ha servido para conocer el proyecto mancomunidado de construcción de dos albergues para la acogida de animales de compañía abandonados.
El proyecto prestará servicio a las comarcas de la Ribera Alta, la Ribera Baixa y la Safor, con una población de casi 477.000 personas, y aboga por un modelo público en colaboración con las entidades protectoras en la recogida, mantenimiento y gestión de las adopciones.
Mollà ha valorado la iniciativa que «se pone a trabajar desde ya en los objetivos que contempla la nueva legislación en favor del bienestar de los animales», y ha enfatizado en «el papel aliado de las mancomunidades para ofrecer este servicio de manera ágil, conjunta y eficiente».
El alcalde de Tavernes ha asegurado que «será una instalación pionera que encaja en el proyecto de la Ley de Bienestar Animal y responde a la sensibilidad de la sociedad».
De momento, el Ayuntamiento de Tavernes propone ceder una parcela (propiedad del consistorio) de más de 3.000 m2 mientras que el de l’Alcúdia también ofrece la cesión de un solar de más de 4.000 m2. Ambos terrenos cuentan con los requisitos necesarios para albergar las instalaciones de custodia y acogida.
Mollà ha destacado la elección de una gestión pública a la que ya se han adherido expresamente 51 municipios y que en el plazo de un año y medio (según las previsiones que maneja la Mancomunidad) podría estar en marcha.
La coexistencia de dos albergues permite establecer sinergias entre ambos núcleos zoológicos y fortalece el servicio de promoción y concienciación a la ciudadanía. En esta línea, la responsable de Agricultura y Transición Ecológica ha puesto el acento en la apuesta por la educación y la formación a través de un módulo específico, alineada con la perspectiva integral de defensa y cuidado de los animales que establece el anteproyecto de ley.