¡El Gobierno de Pedro Sánchez se juega la credibilidad en la lucha contra la pobreza energética con una nueva Estrategia 2026-2030 que promete blindar el bono social, pero deja dos bombas sin detonar! Sara Aagesen, vicepresidenta tercera, llevará este martes al Consejo de Ministros las líneas generales para proteger a hogares vulnerables, con foco en que todos los elegibles accedan al descuento –actualmente solo el 40% lo solicita–, coordinando administraciones y asociaciones. ¡Pero dos incógnitas queman: si las familias numerosas con rentas altas quedarán excluidas (como Ribera prometió en 2023), y si el descuento se mantendrá por encima del 35-50% que entra en vigor el 1 de enero! Colectivos sociales reclaman prohibición «estructural» de cortes de suministro –no temporal como ahora–, mientras el «non-take up» (no solicitud) y la escasez de ayudas dejan a millones en el frío. ¡En un invierno donde la factura eléctrica devora presupuestos, esta estrategia no es un plan; es un pulso por la dignidad energética de los más vulnerables!
El meollo de la incertidumbre es doble y heredado: desde marzo de 2023, Teresa Ribera anunció excluir a familias numerosas con rentas altas del bono social –tras casos como Ossorio o Mónica García–, proponiendo un umbral mejorado por hijo (no fijo como los 26.000 euros iniciales). Pero casi tres años después, el borrador de la Estrategia mantiene la generalidad: ser familia numerosa (tres o más hijos) da acceso automático, sin distinción de ingresos. Fuentes de Transición Ecológica susurran «ajustes pequeños» hasta el martes, dejando la puerta entornada a cambios que limiten el bono por renta –una medida que la Federación de Familias Numerosas defiende como «compensatoria» por mayor consumo energético (más lavadoras, duchas, etc.).
«No es lujo; es necesidad básica», claman, mientras ONG como la Alianza contra la Pobreza Energética priorizan «cobertura real» para vulnerables severos.
El segundo nudo es el descuento: el 1 de enero, el bono social aterriza en 35% para vulnerables y 50% para severos –tras subidas pandémicas del 65-80%–, un recorte que la Alianza tilda de «insuficiente» para facturas que devoran el 10% de rentas bajas. Reclaman mantener al menos el 65% y hacer la prohibición de cortes «estructural» –no anual por decreto, vulnerable a votos en Congreso–. «Es un compromiso que debe ser permanente», insisten, recordando que la prórroga actual depende de convalidaciones que Junts o PP podrían bloquear. El Ministerio promete «mejorar cobertura y reducir non-take up» con coordinación interadministrativa, pero colectivos recelan de redacciones «generales» sin compromisos firmes.
El contexto es un invierno que duele: pobreza energética duplicada en tres años (de 4,5 a 9 millones de afectados), con colectivos exigiendo «prioridad» en bono térmico (200 euros anuales) y avales sin depósitos. ¡En un 2025 con inflación energética al 3%, esta Estrategia no es cosmética; es supervivencia! ¿Excluirá a familias numerosas ricas, o mantendrá la generalidad? ¿Cortes prohibidos para siempre, o otro decreto temporal?
En Agencia6, el termómetro energético sube con estas incógnitas que no avisan: ¡de bono social a bono duda, la pobreza energética en jaque! ¿Te afecta? Comparte en comentarios y síguenos para el Consejo de Ministros – porque un descuento no es lujo; es calefacción digna.
#BonoSocialIncognitas #FamiliasNumerosasRenta #ProhibicionCortesEstruct #PobrezaEnergetica2026 #Agencia6
