En memoria de M.ª José Vidal Llopis,
que en nuestras almas deja un eterno crisol,
elevo mi voz en un poema sentido,
para honrar tu vida con amor y fervor.
Eras un faro de luz en la oscuridad,
con tu sabiduría y tu gran bondad,
guiabas nuestros pasos con dulzura y verdad,
siempre dispuesta a ayudar en la adversidad.
Tus palabras eran un bálsamo para el alma,
con tu sonrisa iluminabas cualquier calma,
dejaste huellas imborrables en cada corazón,
un legado de amor que nos da consolación.
Tu presencia era un regalo en nuestras vidas,
una inspiración constante que nos conmovía,
tu energía y pasión nunca se extinguirán,
pues en nuestros recuerdos siempre vivirás.
Hoy el cielo se viste de luto y tristeza,
al perder a alguien tan lleno de grandeza,
pero tu esencia perdurará en la eternidad,
en cada estrella que brille en la inmensidad.
Descansa en paz, querida M.ª José ,
tu legado vivirá en cada uno de nosotros,
siempre te recordaremos con cariño y gratitud,
por ser un ejemplo de amor, virtud y luz.