En esas estamos, hasta el momento vivía feliz, dichoso y contento con mi rebaño católico, con mis pastores y mi único Mayoral, cuando por culpa del covid-19 he descubierto que mi pertenencia al Consejo Vecinal de Benidorm comporta mi aborregamiento indebido, no deseado pero obligado por las circunstancias.
Sin comerlo ni beberlo me encuentro un día con un w’app de la Vicepresidenta del Consejo, que me pide por favor me abstenga de hacer comentarios buenos y malos sobre la gestión o cualquier otra cosa del coronavirus. A continuación recibo otro w’app esta vez de la Portavoz del Consejo comunicando su baja por ILT por saturación informativa (?). Por último el otro Vicepresidente me envía otro w’app pidiendo por favor que no publique nada que no tenga que ver con el fin del foro que utilizamos… Preparado el escenario y accionadas luces y sonido, el día 24 comienza la acción, el rodaje de la película “El Rebaño Vecinal”.
Un nuevo w’app me comunica que la Mesa Permanente del Consejo Vecinal se ha reunido y ante la situación generada por la actual pandemia ha decidido solicitar al Ay-untamiento que del Presupuesto Municipal del 2020 detraiga la partida correspondiente a los Presupuestos Participativos y la destine a las ayudas a los vecinos de Benidorm afectados por la pandemia. Nada que objetar al cambio de destino, siempre y cuando sea el Pleno del Ayuntamiento quien lo acepte, es decir, si el Pleno aprobó su importe, uso y destino, ha de ser él quien apruebe el cambio, el Mayoral del rebaño no es el amo ni del rebaño, ni de los pastores ni del dinero público.
La película tiene un objetivo propagandístico evidente cuando para “hacer taquilla” el Mayoral da a conocer a través de los medios de comunicación la noticia, en lugar de haberlo hecho el Consejo Vecinal a la espera de la aceptación del Pleno. Alguien tenía prisa, urgencia en el tema y no pudo esperar a tener el consenso y opinión del resto de consejeros, resto en el que me encuentro y en el que tenemos por lo menos la misma solidaridad que la Mesa Permanente para nuestros vecinos, a quienes representamos de hecho y por derecho. Una cosa es que ante el estado de alarma el gobierno me ordene el Quedate en casa y otra cosa muy diferente es que la Mesa Permanente añada: y Cállate.
Los 500.000 € no iban a escaparse, nadie iba a birlarlos, escamotearlos o hurtarlos ¿de dónde vienen las prisas?¿de dónde el apremio?¿de dónde las urgencias y apresuramiento? ¿porqué no se ha pedido la opinión de todos los consejeros? ¿porqué la Mesa Permanente nos trata como a borregos? Nos merecemos al menos un mínimo respeto como personas y por lo que representamos.
Espero que con similar diligencia se controle el uso y destino de los citados fondos públicos y conociendo el paño, con la transparencia debida.
En el Evangelio de San Juan 21, 15-19 leemos: Habiéndose aparecido Jesús resucitado a sus discípulos, después de comer, Jesús dijo a Simón Pedro: “Simón, hijo de Juan, ¿me amas más que éstos? ”Él le respondió: “Sí, Señor, Tú sabes que te quiero”. Jesús le dijo: “Apacienta mis corderos”.
José Antonio Corachán Marzal (Cordero Católico)