Benzemá lidera una gran noche europea de los merengues al imponerse 3-1 al PSG. Los tres goles del francés en un Bernabéu volcado con su equipo dan la vuelta al tanto inicial de Mbappé y clasifican al Real Madrid para los cuartos de la Champions.
El Real Madrid y Benzema escribieron una nueva página en la leyenda de nuestro equipo en Europa. Cuando todo estaba en contra tras el gol de Mbappé en la primera mitad, el Bernabéu llevó en volandas al equipo, que le correspondió con tres goles que dan el acceso a los cuartos de final de la Champions League. Los tres llevaron la firma de un impresionante Benzema, que ya ha marcado 30 esta temporada y se convirtió en el tercer máximo goleador en los 120 años de historia del club tras superar a Di Stéfano.
Los de Ancelotti salieron arriesgando, con una presión muy alta. Nuestro equipo recuperaba el balón en campo contrario, pero el PSG buscaba sorprender al contragolpe y así llegaron sus mejores ocasiones. En las dos primeras, en el minuto 8 y el 13, Mbappé, algo escorado, se plantó ante Courtois, que estuvo más acertado en el mano a mano. La reacción de nuestro equipo no se hizo esperar. El disparo de rosca de Benzema desde la frontal obligó a Donnarumma en el 25’ a mandar el balón a córner con una gran estirada.
El encuentro estaba siendo de ida y vuelta. Neymar combinó dentro del área con Messi, que picó el balón ante la salida de Courtois pero Nacho despejó. Volvía a responder nuestro equipo, esta vez por partida doble con dos testarazos de Benzema tras los centros de Valverde en el 35’ y Kroos dos minutos después. Donnarumma se hizo con el balón en el primero y escasos centímetros separaron al delantero francés del gol en el segundo. El ritmo estaba siendo altísimo y antes del descanso volvió a sorprender la velocidad de Mbappé, que esta vez sí superó a Courtois en el 39’.
Tocaba remontar tras el paso por los vestuarios y en el 61’ llegó el empate. Benzema presionó a Donnarumma, que se equivocó en la entrega del esférico. Lo recuperó Vini Jr. y asistió a Benzema, que fusiló a placer. Tres minutos después pudo llegar el doblete del francés. Centró Rodrygo y el remate de cabeza del galo no encontró portería por muy poco. Nuestro equipo insistía en busca de un gol que podía mandar el partido a la prórroga y la tuvo Vini Jr. en el 73’. El balón le llegó tras un rechazo y su remate con la zurda en el área pequeña se fue elevado.
Noventa minutos en el Bernabéu son muy largos
Todo cambió desde ahí y se vivieron minutos de locura en el Bernabéu. El estadio estaba en ebullición y el equipo le correspondió con una energía que le llevó a marcar dos goles prácticamente seguidos. Todos firmados por un Benzema estelar. El primero llegó en el 76’ tras un jugadón de Modrić, que recibió en su campo y se deshizo de todos los rivales que le iban saliendo por el camino hasta que entregó el balón al desmarque de Vini Jr. El brasileño se lo devolvió y el croata sorprendió con una espectacular asistencia que Benzema se encargó de hacer efectiva con su definición. Nada más sacar de centro el PSG, Rodrygo recuperó el balón y se lo dio a Vini Jr. Marquinhos despejó, pero Benzema, al primer toque, llevó el balón a la red con un precioso remate. Lo más complicado estaba hecho y quedaba mantener este resultado hasta el final. La unión con el Bernabéu hizo el resto para escribir otra noche de leyenda en la Copa de Europa.
