Mientras Leo Messi disfruta de sus vacaciones junto a su familia y empieza a darle forma a lo que será su temporada en el Barcelona, desde Conmebol empiezan a trascender las primeras versiones de lo que sería el castigo a causa de su expulsión frente a Chile y comentarios tras el partido.
Messi podría recibir dos fechas de suspensión por haber visto la roja, y una multa económica por sus dichos al término del partido, en lo que sobresalió la frase «no tenemos que formar parte de esta corrupción».
Tal y como establece al artículo siete de los estatutos de la Conmebol: «comportarse de manera ofensiva, insultante o realizar manifestaciones difamatorias de cualquier índole, insultar de cualquier manera y por cualquier medio a la Conmebol, sus autoridades, oficiales, etc», conlleva una pena a determinar.
Desde el ente regulador se basan en los incisos de dicho artículo para establecer que en primer lugar, Messi será castigado, y en segundo analizan su pena. De todas maneras, una vez conocida la sanción, Messi podrá apelar a la misma en caso de no estar de acuerdo.