Una analítica de sangre que puede detectar signos de alzhéimer hasta 20 años antes de que se manifiesten los síntomas de la enfermedad ha sido desarrollado por un equipo de científicos en Estados Unidos causando sensación entre la comunidad médica mundial.
Esta prueba -mucho más simple y económica que el escáner PET que se hace para confirmar la presencia de alzhéimer- logró identificar cambios en el cerebro ligados a esta enfermedad con un 94% de precisión.
Los resultados de la investigación publicados en la revista Neurology pueden contribuir a que se lleven a cabo más ensayos clínicos, algo que resulta crucial para luchar contra esta enfermedad que por el momento no tiene cura aunque sí se han realizado avances en las últimas décadas. Más ensayos permitirían evaluar si los fármacos que se ponen a prueba pueden prevenir o no la demencia causada por el alzhéimer.
“Actualmente examinamos a las personas para ensayos clínicos con escáneres cerebrales, lo cual lleva mucho tiempo y es costoso. Y conseguir participantes lleva años”, señaló Randall Bateman, profesor de neurología y autor principal del estudio de la Escuela de Medicina de la Universidad de Washington en St. Louis, Misuri. “Pero con un análisis de sangre podríamos potencialmente examinar a miles de personas por mes.
“Eso significa que podríamos inscribir a participantes en ensayos clínicos de una manera más eficiente, lo cual nos ayudaría a encontrar tratamientos más rápido, y podría tener un impacto enorme en el costo que genera la enfermedad así como en el sufrimiento humano que la acompaña”.
El test desarrollado por los científicos estadounidenses midió los niveles de una proteína llamada beta amiloide -ligada al alzhéimer- en la sangre de 158 adultos de más de 50 años, para comprobar si los resultados coincidían con los niveles detectados en los escáneres cerebrales.
Coincidían, pero solo en el 88% de los casos, un porcentaje que no es lo suficientemente preciso como para ser una prueba de diagnóstico válida.
Pero cuando los investigadores combinaron esta información con otros dos factores de riesgo -tener más de 65 años, y una variante genética llamada APOE4, que triplica al menos el riesgo de desarrollar la enfermedad- la precisión del análisis alcanzó el 94%.
Sea como fuere, la esperanza en poder detectar los síntomas en pacientes de la enfermedad del alzheimer crece según se van practicando estas pruebas que dan esperanza a millones de personas en todo el mundo.