¡El fantasma de Koldo regresa con más fuerza que nunca para atormentar los pasillos de Moncloa! Víctor de Aldama, el empresario que se ha convertido en el verdugo involuntario del PSOE con sus confesiones incendiarias, acaba de recuperar el volcado de dos móviles incautados en febrero de 2024 –un iPhone 15 Pro y un iPhone 13 Pro cargados con más de medio millón de fotos y 800.000 mensajes de WhatsApp–, y ya afila el cuchillo para su comparecencia del jueves en la Audiencia Nacional. Con este tesoro digital en mano, Aldama promete intensificar su ofensiva contra el Gobierno: apunta al ministro Ángel Víctor Torres por presunto tráfico de influencias en contratos millonarios de mascarillas en Canarias, revelando cenas con Koldo García, pisos de Madrid con «mujeres de compañía» y demandas de 50.000 euros en negro que él mismo rechazó. ¡Mientras la Fiscalía Anticorrupción valida sus palabras como «veraces», el PSOE tiembla ante un material que podría salpicar desde Ferraz hasta el Palacio de la Moncloa, con Ábalos y Koldo acechando prisión y un juicio que huele a fin de era!
La jugada maestra de Aldama arranca de un pulso judicial que ha durado meses. Detenido en el epicentro del caso Koldo –esa vorágine de comisiones ilegales en adjudicaciones pandémicas por 54 millones de euros–, el empresario reclamó sin éxito sus dispositivos hasta el 10 de noviembre, cuando el magistrado Ismael Moreno cedió ante la presión y autorizó el volcado por la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil. El lunes, el perito informático Gustavo Martínez recibió el disco duro –no encriptado, pero un laberinto de datos por su volumen y formato–, listo para ser diseccionado antes de la declaración del jueves. Fuentes cercanas a Aldama lo pintan claro: «Es material clave para respaldar todo lo dicho ante la Justicia». Ya recuperó un volcado previo en un caso de fraude en hidrocarburos, pero insiste en estos terminales por su rol central en los hechos. «No contiene pruebas directas sobre pagos a Koldo en la caja de Ferraz, pero sí copias sensibles que guardo fuera de España», advierten, prometiendo una «artillería» que podría hacer temblar al Gobierno canario y central.
El blanco principal: Ángel Víctor Torres, ministro de Política Territorial y exlíder del PSOE en Canarias. Aldama lo acusa de tráfico de influencias en contratos adjudicados a su empresa Soluciones de Gestión durante la pandemia: «Koldo me pidió 50.000 euros en ‘B’ para Torres a cambio de agilizar licitaciones», confiesa, aunque asegura haber rechazado el soborno. Va más lejos: sitúa a Torres en pisos madrileños con Koldo y el exministro José Luis Ábalos, «en presencia de mujeres de compañía», y detalla una cena el 15 de julio de 2020 donde el ahora ministro se implicó para sortear trabas administrativas. La UCO ya corroboró la cercanía en mensajes y anotaciones, pero Torres lo niega en rotundo: «No tengo relación alguna con Aldama ni con Koldo». El jueves, Aldama declarará un día antes que Koldo el 28 de noviembre, y el material de los móviles podría ser el clavo en el ataúd de estas sombras canarias, exponiendo un nexo que une archipiélago y península en la red de influencias.
Las confesiones de Aldama no son humo: la Fiscalía Anticorrupción y el Tribunal Supremo las validan como «veraces y compatibles» con pruebas demoledoras –anotaciones de Koldo en documentos ministeriales, pagos de alquileres sospechosos y reuniones con exjefes de gabinete de Reyes Maroto y María Jesús Montero–. Piden 24 años para Ábalos, 19 para Koldo y 7 para Aldama en el juicio por las mascarillas, un correctivo que ya ha devorado carreras y podría arrastrar más. Para el PSOE, es un vendaval: con bases indignadas y un Gobierno en modo supervivencia, Moncloa acelera para capear el temporal, pero Aldama –que se libra con «solo» siete años por su colaboración estelar– huele sangre y no perdona.
Este no es solo un recurso técnico; es un terremoto con réplicas imprevisibles que podría reescribir el mapa de la corrupción pandémica. ¿Corroborará el volcado las bombas de Aldama, o será otro bluff? ¿Cederá Torres, o el PSOE contraatacará con denegaciones furiosas? En Agencia6, el pulso de la Justicia late con esta carga renovada: ¡Aldama no se rinde, y Moncloa tiembla! Sigue las declaraciones en vivo en nuestras redes – porque cuando los móviles hablan, los secretos salen a la luz.
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