Rumer Willis, la hija mayor del actor Bruce Willis, ha compartido una emotiva reflexión sobre el impacto de la demencia frontotemporal (DFT) que padece su padre desde 2022. En respuestas a fans a través de Instagram Stories, la de 37 años ha admitido que duda si Bruce la reconoce cuando la visita, pero enfatiza la conexión emocional que aún persiste: «Le abrazo y siento su amor de vuelta, aunque no sepa quién soy». La actriz, que es abuela primeriza, ha expresado gratitud por poder llevar a su hija Luetta a ver al abuelo y percibir «una chispa» en él.
La conexión que perdura pese a la enfermedad
Rumer ha respondido a una seguidora que preguntaba por el estado de Bruce:
«La verdad es que a nadie con DFT le va bien. Pero cuando voy y le doy un abrazo, reconozca o no, él siente mi amor y yo el suyo. Veo una chispa en sus ojos, y eso es lo que cuenta».
En otra historia, ha detallado:
«Me siento tan agradecida de poder ir con Luetta y pasar tiempo con él. Siento el amor que me tiene, y yo se lo doy de vuelta».
La DFT, diagnosticada a Bruce en 2022 tras un retiro forzado por afasia, es una forma progresiva de demencia que afecta el lenguaje, el comportamiento y la personalidad. La familia ha sido abierta sobre el proceso, pero Rumer ha evitado idealizarlo: «Esos parámetros de ‘está genial’ ya no aplican».
El apoyo familiar y el mensaje de esperanza
Rumer, fruto del matrimonio de Bruce con Demi Moore, ha destacado cómo la enfermedad ha unido a la familia. Sus hermanas menores, Scout y Tallulah, también han compartido actualizaciones similares, enfatizando la importancia de vivir el presente. La actriz ha usado su plataforma para concienciar sobre la DFT, una condición que afecta a unos 50.000 españoles y que carece de cura, aunque tratamientos como terapias ocupacionales pueden ralentizar síntomas.
En redes, el testimonio ha generado miles de mensajes de apoyo, con #AbrazoBruce como tendencia. Rumer ha cerrado respondiendo: «El amor trasciende el reconocimiento; eso es lo que nos mantiene unidos».






