OPINIÓN
Digo yo que sería conveniente saber que resultados hemos obtenido en Benidorm de la real visita, tanto si los hay como si no los hay. Es de esperar que el oscurantismo transparencial de nuestro opaco equipo de gobierno municipal y sus sigilosos y afónicos opositores den la callada por respuesta, pero ello nos permite abrir la puerta a elucubrar algunas respuestas, no sin antes y ante el anuncio de que durante su visita iban a reunirse con representantes del mundo turístico y sindical, esperar que el representnte de Hosbec nos deleite con su palabra subvencionada y a los representates sindicales si cuentan con algún sindicado nos cuenten lo que sus jefes del PSOE e IU les autoricen.
Reconozco que cuando me enteré de la Visita Real al Smart Benidorm con su Safety Beach, propiciada por Visit Benidorm, quedé sorprendido porque pensé que había de haber alguna o algunas razones de peso para ello, y fuí mentalmente repasando justificaciones: ¿Se volverá a poner en funcionamiento el geiser de Punta Canfali? ¿vendrá a decirnos cuándo llegará el AVE a nuestro término? o tal vez ¿cuándo comienzan las obras de la Comisaría del Cuerpo Nacional de Policía? o mejor, como la imaginación no tiene límites ¿cuándo se pone la “segunda piedra” del Centro Comercial? Incluso llegué a pensar alcanzando la paranoia urbanística que la Vista Real estaría motivada por la colocación del Mono-hito Triangular en la plaza de los Tacones Rotos.
El problema es que sin querer, con el “poquet a poquet” de unos, el “Benidorm mejora!” de otros y el “Yo a lo mío” de todos, he traspasado los límites psíquicos de la paranoia por culpa del estres inducido por los malditos políticos que me rodean a todos los niveles, estatal, comunitario y local. Así de la esquizofrenia paranoide, he pasado al trastorno delirante y de éste al PPD (Trastorno de Personalidad Paranoide) y con ello voy camino del delirio persecutorio, por lo que espero gracias al NAMI (Alianza Nacional para Enfermedades Mentales), al Instituto Nacional de la Salud Mental (NIMH) y la Asociación Americana de Psiquiatría, comenzar un tratamiento apropiado sin necesidad de acudir al Salario Mínimo Vital (IMV), que no me alcanzaría para una adecuada medicación.
Pero medicado y tratado psiquiatricamente vuelvo a las andadas mentales: Menos Visitas Reales y mas Geiser, mas Comisaría, mas AVE, mas Centro Comercial y mas Monoloque sea. Entiendo que para visitar una ciudad muerta, desde el punto de vista turístico-cultural, hubiera sido mas conveniente visitar Pompeya. No obstante no estoy demasiado preocupado por mi salud mental por una razón fundamental: No he tenido la ocurrencia de preguntarme: ¿La Visita Real nos traerá el nombramiento de Ciudad Turistica?, lo cual me tranquiliza.
Por último desde la Ghost Town de Benidorm recomendar paciencia, calma y aguante al lector frente al Gobierno de Coalición socio-comunista. Durará lo que dure la Caja, para cuando se agote el efectivo de las ayudas interesadas de la Unión Europea… ¡Adios Mari Carmen!
José Antonio Corachán Marzal
