Tras la bajada ofrecida ayer domingo con 288 muertos, la cifra de hoy coloca la cantidad de fallecidos en 331 sumando en total 23.521 muertes por coronavirus, el 11,3% de los muertos contabilizados en el mundo. Los expertos y políticos regionales aseguran que esas cifras están muy por debajo de las reales tras el cambio de metodología a la hora de computar fallecimientos y contagios.
En las últimas horas, amén del repunte que delatan las cifras, la polémica se ha centrado en las imágenes captadas en todo el territorio español con la salidad de niños menores de 14 años bajo el estado de alarma que sufrimos todos los españoles. La normativa marcaba unas directrices que, sin duda, se incumplieron a la vista de las imágenes, donde los niños jugaron con amigos sin mascarillas, mientras sus padres formaban corrillos hablando sin guardar la pertinente distancia de seguridad y sin portar los tapabocas que limitan los contagios.
Muchos alcaldes se vieron obligados a cerrar parques y jardines ante el incumplimiento de la normativa marcada por el gobierno de Pedro Sánchez, quien sin duda ha vuelto a demostrar su total incapacidad a la hora de legislar con rigor este tipo de situaciones que podrían dar paso a un retroceso en el control de la pandemia.
Los expertos vienen criticando al ejecutivo por no haber realizado de forma masiva los test de control de la pandemia de coronavirus, y de esta forma tener un manejo real de la evolución de la pandemia en España. La salida de niños, pero también de sus padres, podría producir contagios al ser muchos de ellos asintomáticos, y trasladar la enfermedad a las personas mayores, uno de los parámetros que se exigió desde un principio del confinamiento, con tal de evitar el contagio a un colectivo muy vulnerable como son los ancianos o personas de la tercera edad.
La polémica está servida, máxime cuando ahora el gobierno dice haber iniciado el control serológico, algo que anunció el 8 de abril que ya estaban en ello, y por lo visto, se trataba de un «bulo».
Entretanto, los escándalos se acumulan entre algunos miembros del gobierno, como el vicepresidente segundo, con ataques a sentencias judiciales y las réplicas del Consejo General del Poder Judicial.
Y por si fuera poco, mientras el gobierno permite salir a menores y sus padres, está solicitando a las autonomías que dupliquen las camas en las UCIs de los hospitales. ¿Acaso temen un repunte ante las diabólicas medidas que se están tomando con ciertos sectores de la sociedad?