Los españoles andamos atónitos ante los dos gobiernos que andan peleándose ante nuestras narices, donde ya ni tan siquiera disimulan que andan a gritos en la mesa del Consejo de Ministros. Mientras tanto, a colación del colonavirus, en todos los países del mundo han dado la cara los presidentes del gobierno intentando tranquilizar a sus ciudadanos. Aquí el ilegítimo presidente que tenemos (lo de ilegítimo va por sus mentiras a la hora de lograr votos con falsas promesas) ni da la cara ni aparece en medios donde se le pueda preguntar por los continuos escándalos de su Ejecutivo. ¡Con lo que le gusta a él verse guapo en pantalla y decir que «yo soy presidente del gobierno», ¿verdad?!No sabemos si es que está en cuarentena y tampoco lo quiere decir, más que nada por su afición a la «trola».
Y mientras tanto, estamos viendo perplejos lo barato y bueno que resulta dar un Golpe de Estado en España. De momento ya han encontrado trabajo los nueve condenados por lo sucedido en 2017 en Cataluña, y su libertad total es cuestión de tomarse un par de cervezas. Increíble pero cierto.
El otro día, a colación de la Ley de Sexualidad, la macabra Ley que quiere imponer la infame Irene Montero y su protector Iglesias, supimos que en las cárceles españolas hay 70.390 hombres y mujeres. A todos ellos, lo primero que les pide la Junta de Tratamiento de la prisión donde esté es que se arrepientan del delito cometido. Los catalanes no sólo no se han arrepentido, sino que además vocean sin tapujos aquello de que «lo volveremos a hacer». Todo un dislate, una farsa, una mentira, una tomadura de pelo, que es lo que verdaderamente tenemos en La Moncloa.
Para esta gentuza que quiere llevarnos a una confrontación civil entre españoles, todo es una alfombra roja, pero sin embargo, hoy mismo y por coger un simple ejemplo de rabiosa actualidad, se piden 28 años de prisión desde la Abogacía del Estado (la misma que reculó en el juicio del proceso catalán) para los actores Ana Duato e Imanol Arias, por presunto delito fiscal.
Ellos pagaron ya buena parte de la deuda que les reclamó Hacienda, pero sin embargo, ya hay portadas en algunos medios donde se deja claro que aunque pagues, si le tocas las narices a Hacienda y no eres político, y sobre todo de izquierdas (véase los ERE de Andalucía), te pueden pedir que te pudras en un centro penitenciario. A ese punto estamos llegando en España con el actual desgobierno y los anteriores, porque si somos sensatos, todos son culpable de legislar de forma que siempre pagamos los platos rotos los mismos mientras ellos se van de rositas por muy gordas y golfas que las hagan.
Ustedes son inteligentes y creo que ya no hace falta seguir comentando nada más. El tiempo, único juez insobornable en la vida, pondrá a cada uno en su sitio, de eso no tengan duda.
Feliz viernes!